Castillo de Peñafiel: Historia, el vino y mucho más

El noroeste de España también cuenta con interesantes ejemplares de castillos medievales y construcciones amuralladas. En esta ocasión os hablaremos de una joya vallisoletana apodada “el buque de Castilla”. Se trata del Castillo de Peñafiel, una hermosa fortaleza emplazada a lo alto de un risco que domina la ribera del Duero y Duratón.

Este es el resultado de distintas etapas constructivas ocurridas entre los siglos X y XV. Desde su construcción tuvo especial protagonismo para con el territorio que, anteriormente, marcaba la frontera de los territorios cristianos.

En el presente, no sólo destaca por su singular historia, también alberga el Museo Provisional del Vino. Un lugar dedicado a ofrecer las mejores experiencias de enoturismo a los visitantes.

¿Te animáis a saber más sobre esta fortaleza?, ¿queréis conocer todos sus secretos y curiosidades?, ¡entonces, acompáñanos en esta nueva aventura!

Historia del castillo de Peñafiel

En el pasado, tanto cristianos como musulmanes convergieron en la villa de Peñafiel, dada su consideración como enclave fundamental en la línea defensiva del Duero. Esta situación se consolidó entre los siglos IX y X, cuando el lugar delimitó parte de la frontera entre los territorios cristianos y árabes. Inclusive, marcaba el punto final de la ruta del río Duratón; un antiguo camino medieval que guiaba hacia las tierras segovianas.

Según la documentación del año 943, el origen de la fortaleza de Peñafiel tuvo lugar durante este siglo, en pleno reinado Ramiro II de León. Más tarde, en 983, la villa es asediada por las fuerzas del canciller Almanzor. Este período de imposición musulmana se extendió hasta 1013, momento en que Peñafiel fue conquistada por el conde castellano Sancho García.

A este ilustre personaje se adjudica la frase célebre que reza así: «Desde hoy en adelante esta será la peña más fiel de Castilla.» De allí la procedencia del nombre de la villa, puesto que antes Peñafiel era conocida por su primer nombre Peñafalcón.

En 1112, Alfonso I (el batallador) visitó la fortaleza, debido a los desacuerdos conyugales que existían entre él y Urraca de León. En ese tiempo fue alcaide del castillo el burgalés Álvar Fáñez; un primo hermano del renombrado Rodrigo Díaz de Vivar, mejor conocido como El Cid.

Posteriormente, el señorío de Peñafiel fue instituido por Fernando III de Castilla (el santo) en honor a su hijo Alfonso X (el sabio). Luego, este lo transfirió a su sobrino, el infante D. Juan Manuel, a quien dotaron con los recursos necesarios para reedificar el antiguo castillo.

El Castillo de Peñafiel en años posteriores

Durante el siglo XIV, al establecerse Pedro I en el poder, el señorío fue suprimido y los bienes pasaron a propiedad regia. No obstante, durante un tiempo, la titularidad también le perteneció a la esposa de Enrique II, Juan Manuel.

En el año 1390, Juan I donó la villa a Fernando de Antequera, para luego ser heredada por Juan de Aragón. Este último se alzó contra el monarca Juan II de Castilla, quien en 1451 ordenó la posterior demolición del castillo de Peñafiel.

Tiempo después, en el año 1456, el entonces infante Enrique de Castilla, entregó la villa al maestro de la Orden de Calatrava, Pedro Tellez Girón. Tras su muerte, se agregó al castillo un muro y foso interior, además se reforzaron algunos elementos del torreón norte para uso de la artillería.

Conjuntamente, gracias a la confirmación de los Reyes Católicos, la familia de Girón se mantuvo al mando del castillo hasta la llegada del S.XIX. Tras sufrir una época de abandono por el Duque de Osuna, en los tiempos de Felipe III de España, también se remodeló.

De acuerdo con la documentación de la época, el castillo sufrió un incendio en el año 1755. Después, al inicio del S.XIX, debido al deterioro, los vecinos comenzaron a arrancar los sillares de la fortaleza para reutilizarlos en el pueblo. En este mismo siglo, durante 1868, se realizaron obras de defensa y acondicionamiento en torno a la fortaleza por mandato del Capitán General de Castilla.

El castillo de Peñafiel en el presente

Para el año 1917 el castillo de Peñafiel fue declarado Monumento Nacional. Actualmente, toda la fortaleza se encuentra completamente restaurada, sin embargo, se ha conservado su aspecto medieval.

A finales del siglo XX, se inauguró el Museo Provincial del Vino, ubicado en el ala sur de la fortaleza. Tras su renovación en el año 2015, este es conocido por resguardar parte de la exquisita tradición vinícola de la Ribera del Duero. Durante el año 2017 recibió más de 86 mil visitantes, por ello, se considera el lugar predilecto del turismo enológico de la región.

Asimismo, debajo de las dependencias del castillo se hallan las famosas “Bodegas Protos”, las cuales podréis visitar para realizar catas de vino.

En 2019 se publicó un libro sobre la historia del Castillo de Peñafiel, redactado por: Jesús de la Villa Polo y Daniel Sanz Platero.

Estilo del Castillo

En términos generales, la reconstrucción del castillo de Peñafiel se dio a lugar siguiendo los lineamientos del modelo de la Escuela de Valladolid. No obstante, su planta no corresponde a este arquetipo. De hecho, dada su forma alargada (similar a la de un navío) el castillo es denominado el “buque de Castilla”.

Si apreciáis su estructura podréis notar detalles producto de importantes intervenciones, mayormente realizadas durante los siglos XIV y XV. De allí surge su aspecto con tintes y muestras clásicas de la arquitectura gótica germánico.  

Su muralla exterior que cierra el perímetro de la fortaleza es el elemento más antiguo, ya que data del siglo XI.

Castillo de Peñafiel: interior

Como os mencionamos arriba, el trazo de su planta posee una forma estrecha y alargada de aproximadamente 35 metros de ancho y 210 de longitud.

Hacia el extremo oriental se halla la única puerta de acceso a la fortaleza, rodeada por sendos torreones de planta circular. Anteriormente, estos estaban coronados con matacanes, sin embargo, hoy en día sólo quedan los modillones de estos. Esta parte corresponde al recinto exterior, que también comprende la Torre del Homenaje rematada con ocho torrecillas cilíndricas.

El recinto interior está formado por un segundo cuerpo de murallas que constituye 28 cubos almenados, intercalados de manera equidistante entre sí. Gracias a este detalle junto con la sucesión de muros almenados se logró prolongar el cuerpo de la fortaleza por el terreno. Igualmente, esta parte de ese transitable en su cumbre por medio de los adarves.

A 30 metros de altura se alza la suntuosa Torre del Homenaje del Castillo de Peñafiel, la cual separa dos grandes patios interiores. El primero era ocupado por los almacenes y aljibes del castillo. En cuanto al segundo, en el pasado albergaba las caballerizas y guarniciones, no obstante, hoy es el espacio predilecto del museo.

Castillo de Peñafiel: visitas

El recorrido por la fortaleza de Peñafiel comienza con una visita a la Torre del Homenaje y los patios que la rodean. Esta tiene una duración aproximada de una hora. Durante este tiempo podréis disfrutar de la historia y la arquitectura que desde la época medieval forjó el carácter del recinto.

En el cubo principal también tendréis la oportunidad de recorrer los salones y subir a la azotea del castillo. Allí se encuentra un mirador con vistas privilegiadas que dan hacia el pueblo y las hermosas riberas del Duero y Duratón.

La siguiente parada es el Museo Provincial del Vino, alojado en el extremo sur del recinto. Una parada obligatoria que deberéis hacer si sois amantes del buen vino.

Ahora, para acceder al castillo podréis hacerlo subiendo con vuestro coche particular. En ciertas ocasiones (sobre todo en días festivos nacionales), la fortaleza dispone de un servicio de autocar gratuito para sus visitantes. Estos funcionan de acuerdo con el horario de apertura del museo y salen, aproximadamente, cada media hora.

La última visita guiada por el castillo de Peñafiel siempre se realiza 45 minutos antes del horario de cierre. Toda la visita se realiza acompañado de un guía de habla hispana. Cabe destacar que las instalaciones no son aptas para mascotas y tampoco para personas con movilidad reducida.

¿Cómo llegar?

Podréis llegar a la localidad de Peñafiel a 50 minutos de Valladolid; desde Madrid son dos horas yendo hacia el norte.

Distintos atractivos turísticos de la localidad de Peñafiel

Otros lugares que podréis disfrutar si vais de paso por el pintoresco pueblo medieval de Peñafiel, son:

  • La Plaza Mayor de Peñafiel, también conocida como Plaza del Cosos. Fue declarada BIC por ser una de las plazas más antiguas de España que destaca por su belleza y majestuosidad.
  • El Convento de San Pablo, que destaca por su estilo gótico mudéjar.
  • El Barrio de la Judería.
  • La casa Museo de la Ribera.

Castillo de Peñafiel: precios y horarios

A continuación, te daremos todos los detalles para que planifiques vuestra propia visita al castillo de Peñafiel.

Horarios de visitas al castillo

  • Del 1 de abril al 30 de septiembre (abierto de martes a domingo, incluyendo días festivos) — De 10:30 a 14:00 h. y de 16:00 a 20:00 h.
  • Del 1 de octubre al 31 de marzo (abierto de martes a domingo, incluyendo días festivos) — De 10:30 a 14:00 h. y de 16:00 a 18:00 h.

Durante estos meses, el castillo cierra sus puertas los lunes; además del 24, 25 y 31 de diciembre y del 1 al 6 de enero.

Para las visitas es necesario contar con una reservación que podréis hacer siempre que haya disponibilidad. Recuerda que todas las visitas al castillo son guiadas, no obstante, la entrada al museo es completamente libre.

Para obtener más información sobre los horarios y posibles cambios, podréis llamar al siguiente número telefónico: +34 983 881199

También tendréis la opción de contactar a los encargados escribiendo al correo: museodelvino@dip-valladolid.es o visitando la página oficial del museo.

Castillo de peñafiel entradas

El precio de las entradas al castillo de Peñafiel puede variar dependiendo de la visita.

  • €; por grupos: 5€; menores de 12 años 3,30€

Del mismo modo, dependiendo de la temporada también podréis disfrutar de otros servicios y promociones añadidas en el Museo Provincial del Vino de Peñafiel.

Para más alternativas también las podréis adquirir junto con otros recursos turísticos gracias al uso de la Tarjeta Turística “Ribera Friendly”.

De cualquier manera, podréis adquirir vuestras entradas al Castillo de Peñafiel ingresando al siguiente sitio web.

Castillo de Peñafiel y el vino

Dado que la Ribera del Duero es conocida como tierra vinícola, no es de extrañar que una de las atracciones de Peñafiel sean sus vinos. No obstante, la exposición de vinos en el museo del Castillo de Peñafiel comprende desde variedades locales hasta selecciones de gran valor a nivel mundial.

Durante vuestra visita al Museo Provincial del Vino podréis degustar otras alternativas provenientes de otras localidades como: Cigales, Toro, Rueda y Tierra de León.

En este centro interactivo también tendréis a vuestra disposición paneles informativos que os mostrarán la fascinante historia vinícola de la comarca. Igualmente, en el museo podréis conocer el mayor número de denominaciones de origen español; la más popular del momento es la D.O Ribera del Duero.

Por supuesto, veréis también varias figuras autómatas que presentan diversos oficios vinculados al mundo y arte de los vinos; como el tonelero o el vidriero.

Sin embargo, el objetivo principal de la exposición es mostrar al visitante las diferentes fases que comprende la elaboración de un buen vino.

Desde la recolección y selección de las mejores uvas, pasando por el prensado, destilación, conservación de las botellas, la bodega, entre otras. Así hasta llegar finalmente a la cata del producto. En esta podréis aprender los distintos pasos que van desde el análisis visual del vino, la proyección de los aromas y degustación de este.

Por último, tendréis la alternativa de visitar una sección dedicada a las fiestas, trajes y costumbres centradas en este maravilloso producto de la región.

¿Por qué es famoso Peñafiel?

Peñafiel es famoso por su impresionante castillo y su destacada industria vinícola. Ubicado en la provincia de Valladolid, en la comunidad autónoma de Castilla y León, este encantador pueblo atrae a visitantes de todo el mundo por su rica historia, su arquitectura medieval bien conservada y su delicioso vino de la Denominación de Origen Ribera del Duero. El castillo de Peñafiel, en particular, es un símbolo emblemático de la región y una de las fortalezas mejor conservadas de España.

¿Cómo se sube al Castillo de Peñafiel?

Para llegar al Castillo de Peñafiel, los visitantes pueden acceder fácilmente a pie desde el centro del pueblo. La subida al castillo puede ser empinada en algunos tramos, pero ofrece impresionantes vistas del paisaje circundante y del valle del río Duero. Además, el castillo suele estar abierto al público para visitas guiadas, lo que permite a los visitantes explorar su interior y aprender sobre su fascinante historia.

¿Quién mandó construir el Castillo de Peñafiel?

El Castillo de Peñafiel fue mandado construir por orden de Alfonso VIII, rey de Castilla, en el siglo XII. Su construcción se inició alrededor del año 960 y fue ampliamente renovado y fortificado durante el reinado de Alfonso VIII. A lo largo de los siglos, el castillo ha desempeñado un papel importante en la defensa y la historia de la región, convirtiéndose en uno de los monumentos más emblemáticos de Peñafiel y de toda Castilla y León.